El síndrome del impostor es un fenómeno que se extiende a nivel global. Quienes lo sufren no son capaces de reconocer sus méritos y no se sienten merecedores de sus logros, lo cual les afecta a ellos tanto como a su negocio.
Aunque se sabe que afecta más a las mujeres que a los hombres, porque estas tienen una mayor presión social para lograr mejores resultados tanto a nivel profesional como social, lo cierto es que cualquiera puede sufrirlo.
8Hablar puede ayudar mucho
Siempre que existe un problema a nivel anímico, una de las mejores soluciones es hablar de ello con alguien. O plasmar los pensamientos por escrito en una especie de diario. En cualquier caso, dejar salir los malos pensamientos.
Desahogarse es una de las mejores formas de librarse de toda las ideas recurrentes y pensamientos negativos que impiden disfrutar de los éxitos y del día a día.