El síndrome del impostor es un fenómeno que se extiende a nivel global. Quienes lo sufren no son capaces de reconocer sus méritos y no se sienten merecedores de sus logros, lo cual les afecta a ellos tanto como a su negocio.
Aunque se sabe que afecta más a las mujeres que a los hombres, porque estas tienen una mayor presión social para lograr mejores resultados tanto a nivel profesional como social, lo cierto es que cualquiera puede sufrirlo.
3Se puede solucionar
Lo bueno de este síndrome es que se puede solucionar. Aplicando pequeños cambios en la forma de hacer las cosas y de percibir el entorno se pueden lograr importantes avances hacia la mejora.
El objetivo es que el emprendedor sea capaz de ver su realidad y sentirse orgulloso de lo que ha conseguido. Esto mejorará su autoestima y le estimulará a seguir trabajando para mejorar más su negocio.