El huevo es un alimento habitual en la alimentación de los seres humanos. Protegidos por una cáscara, son ricos en proteínas y lípidos. Además, se trata de un alimento de fácil digestión que es un componente principal de muchos platos tanto dulces como salados, aunque también se puede consumir por separado, como en el caso del huevo frito.
Sin embargo, a la hora de utilizarlo o consumirlo es importante comprobar que se encuentra en perfecto estado porque son de esos alimentos que menos tiempo se conservan y que más miedo nos dan de comerlos en mal estado. Y es que las consecuencias en el organismo pueden ser graves. Te contamos trucos para saber si un huevo está malo.
2RICO EN VITAMINAS Y MINERALES
El huevo aporta una amplia cantidad de vitaminas (A, B2, Biotina, B12, D, E y K) así como de minerales. Entre estos últimos podemos encontrar fósforo, hierro, yodo, selenio y zinc. La biotina que contiene ayuda a la hora de proteger la piel y a mantener las funciones corporales.
La acción antioxidante de las vitaminas y oligoelementos del huevo contribuyen a lograr una mayor protección del organismo frente a procesos degenerativos, enfermedades cardiovasculares y diabetes. Asimismo, su consumo ayuda a proteger frente al desarrollo de la arteriosclerosis.