El emprendimiento no entiende de edad. Nunca es demasiado tarde ni demasiado pronto para empezar un negocio propio. Así, junto a los oldpreneurs nos encontramos con líderes jóvenes que no tienen miedo de dirigir su propia empresa, aunque apenas hayan superado la barrera de la veintena.
Sin embargo, para una persona joven es complicado dirigir un equipo formado por profesionales que pueden hasta doblarse la edad. Pero no es imposible, vamos a ver algunas claves para hacerlo de la mejor forma posible.
6Los líderes jóvenes deben estar dispuestos a aprender
Como decíamos antes, si el líder es humilde, no tendrá problema a la hora de asumir que hay cosas que no sabe, e incluso podrá pedir ayuda a sus empleados para aprender sobre aquello en lo que no tiene experiencia.
Pedir ayuda al equipo de trabajo no es un signo de debilidad, sino todo lo contrario. Es una buena forma de demostrarle a los empleados que se confía al máximo en ellos y se valoran sus conocimientos y sus habilidades.