El emprendimiento no entiende de edad. Nunca es demasiado tarde ni demasiado pronto para empezar un negocio propio. Así, junto a los oldpreneurs nos encontramos con líderes jóvenes que no tienen miedo de dirigir su propia empresa, aunque apenas hayan superado la barrera de la veintena.
Sin embargo, para una persona joven es complicado dirigir un equipo formado por profesionales que pueden hasta doblarse la edad. Pero no es imposible, vamos a ver algunas claves para hacerlo de la mejor forma posible.
5Hay que trabajar la empatía
Si el líder tiene un carácter humilde, no le costará generar empatía con sus empleados. Porque debe ser consciente de que estos se encuentran en una etapa profesional y vital completamente diferente a la suya.
El emprendedor joven puede querer dedicar todo su tiempo a su negocio, pero debe entender que sus empleados tienen una vida y una familia, y que valorarán más esos factores que su propio trabajo.