La ensaladilla rusa es un plato con mucha historia. Pero en este caso no podemos hablar de una receta typical spanish, a pesar de que sea muy conocida en nuestro país, ampliamente utilizada en nuestras casas, y que la podemos encontrar en casi todos los restaurantes y bares de toda la geografía española. ¿Qué tiene la ensaladilla rusa que tanto enamora? Hoy os vamos a hablar de la de Alberto Chicote.
En realidad, no se trata de otra cosa que de una ensalada, pero que se le pueden añadir tantos ingredientes como colores hay en el universo. Hablaremos de su origen y de las distintas formas que ha adquirido a lo largo de la historia, y sobre todo, la forma que tiene Alberto Chicote de preparar la suya para que no pierdas de vista tu plato del verano.
5Últimos pasos: los guisantes y la remolacha
Primero escaldamos en agua los guisantes, pero sólo durante 10 segundos. Los refrescamos en agua helada y escurrimos. Pelamos la remolacha y la cortamos en láminas muy finas con la mandolina. Freímos las láminas de remolacha en aceite muy caliente (170 C)º hasta que estén bien crujientes, y las escurrimos sobre un papel absorbente. Mezclamos las patatas con los guisantes, las zanahorias, las huevas de trucha y parte del atún, y aderezamos todo con un chorrito de aceite de oliva virgen extra de la variedad arbequina, y sal maldón. ¡Qué aproveche!
