Los productores del mar afrontan la subida de los costes de las materias primas, electricidad y combustibles en todo el mundo. Así lo han asegurado numerosas empresas expositoras en el estreno de Seafood en Barcelona a preguntas de MERCA2. Sin embargo, estas empresas están asumiendo todos los costes sin la posibilidad de poder trasladarlos a las grandes cadenas de distribución, como Lidl y Aldi. «Su poder de negociación es intocable«, han afirmado fuentes de una de las compañías que sirve el preciado camarón a estas superficies.
Varias compañías han señalado especialmente a Lidl y Aldi por impedir el traslado de los altos precios de la energía y del combustible
Esta guerra del camarón se adentra ahora en el final de la temporada del producto fresco del mar. A partir de mayo, como suele ser habitual en los meses sin «r», la mayoría del producto es congelado para dar descanso a los caladeros para poder regenerarse.
En Seafood, varias compañías han señalado especialmente a Lidl y Aldi por impedir el traslado de los altos precios de la energía y del combustible, pero también se han fijado en otras, como Carrefour. Ninguna de ellas ha mencionado Mercadona en este sentido sobre el precio al que paga el camarón.
EL CAMARÓN Y LAS TALLAS
Y es que, este mercado tiene numerosas particularidades. No existe un precio estipulado para cada una de sus numerosas especies. Todo depende su talla. Hay grandes especies que alcanzan el kilo con solo once ejemplares, otras necesitan entre 100 y 200 piezas. En medio, un abanico completo de entre 13 y 15; 16 y 20; 31 y 40…
La talla y su calidad es la medida exacta que se utiliza a la hora de negociar el precio en las plataformas de trading y lonjas. El precio medio, según indican las empresas, alcanza entre los 5 y 7 euros por kilo en origen.
En la mesa y comprado en un gran distribuidor, este precio se triplica. De hecho, según ha comprobado este medio, los precios del camarón nórdico alcanzan los 15,4 euros por kilo, si bien Lidl, por ejemplo, los vende en paquetes de 300 gramos por poco más de 5 euros. Caso parecido es el de Aldi, donde el camarón oscila entre los 15 y los 18,3 euros por kilo, dependiendo del tamaño.
PRECIOS MÁS ELEVADOS EN ESPAÑA QUE EN ALEMANIA
En Alemania, el precio se sitúa en los 9,99 euros por kilo, un 35% por debajo del que se ofrece en España. De hecho, los márgenes, según los precios de las tiendas online de ambos países, son más abultados en España.
La mayoría de las empresas consultadas afirman que estas dos grandes distribuidores no acceden a las demandas ni tampoco se avienen a negociar de buena fe. «Es un no rotundo«, han explicado las fuentes consultadas. «No hay posibilidad remota para poder trasladar precios, mientras ellos sí los están incrementando a los consumidores», han destacado.
Algunas de las firmas han salido en defensa de Lidl y Aldi, al considerar que ellas también están sufriendo las subidas de los costes del transporte y la energía, así como los incrementos de los salarios. Y es que, Lidl ofrece uno de los salarios mínimos más elevados del sector, con unos 1.300 euros brutos mensuales. El otro supermercado alemán tiene también sueldos similares, entre los 1.050 y los 1.300 euros brutos que cobra un cajero.
Sin embargo, los salarios en Lidl en Alemania son 3.000 euros brutos más al año por el mismo puesto de vendedor, según varias webs de empleo, mientras que de media esta nómina alcanza los 26.000 euros para los estudiantes en prácticas.
LIDL Y ALDI INCREMENTAN SALARIOS
Aldi, por su parte, ha incrementado recientemente los salarios mínimos a todo su personal para hacer frente a la inflación y las subidas en la competencia. «Todo ha subido el precio, es más caro y los empleados también lo sienten«, ha afirmado la firma alemana en Düsseldorf.
El aumento de sueldo es del 12%, cubriendo así la inflación del país y evitando la pérdida de poder adquisitivo. De esta forma, los sueldos serán de 14 euros por hora frente a los 12,5 que actualmente cobran. Este crecimiento se aplicará a partir de junio. De esta forma, el salario mínimo en Aldi es un 33% superior al establecido en el país.
Según los datos correspondientes a la inflación en abril, facilitados por el Instituto Nacional de Estadística, por otro lado, los precios de los productos del mar, como pescado y el marisco, congelado y fresco indistintamente, han bajado de precios en abril respecto al mismo mes del pasado año. Sin embargo, tras derrumbarse el precio en tasa interanual, las subidas se han registrado desde el inicio del año.
EL DEBATE DEL ATÚN EN SEAFOOD
Respecto a enero, el precio del pescado fresco y refrigerado se ha incrementado en 10,2 puntos; mientras que el marisco se ha incrementado en 2 puntos tras una brusca caída en 2021. El pescado procesado ha subido también cinco puntos desde los mínimos. Este tipo de productos ha sido otro de los debates en la feria mundial del mar, especialmente en lo referente al atún.
Ecuador, productor mundial, está sufriendo por la invasión de Rusia a Ucrania, pero también por el veto de China en 2020 al encontrar un lote infectado con coronavirus en el embalaje. El país exporta directamente a productores reconocidos españoles, que lo envasan y lo distribuyen en los lineales de las principales superficies. El precio de este pescado se ha incrementado, pero de forma suave en comparación a otros productos de primera necesidad. El 40% de su producción se lleva al Sur de Europa, mientras que la mayor parte se vende en Estados Unidos y Reino Unido.
Ecuador no ha logrado instaurar una marca propia ante el altísimo valor de las marcas existentes en el mercado. Sin embargo, ha hecho valer su calidad y precio en comparación con el resto de competidores, especialmente en España. Las empresas españolas dedicadas a este negocio y presentes en Seafood prefirieron guardar silencio sobre qué tipo de atún compran más a la hora de hacer sus conservas.