El grupo Inditex ha perdido el trono de la Bolsa española desde que el mercado conoció el relevo en la cúpula directiva, con la abrupta salida de Pablo Isla. En lo que va de año la capitalización de la compañía se ha reducido en 24.900 millones de euros, un abismo al que se asoma Marta Ortega, que se queda al mando del imperio textil, junto con el consejero delegado, Oscar García Maceiras, un hombre del mundo financiero que carece de experiencia en el sector pero que ayudará a la hija del fundador a navegar en estas aguas turbulentas.
NERVIOSISMO EN ARTEIXO
Fuentes cercanas a la nueva presidenta confirman a este diario que el desplome de las acciones han generado cierto nerviosismo en la sede de Arteixo, aunque lo cierto es que la compañía goza de solidez financiera y tiene una estrategia adecuada para afrontar los retos que se le presentan a corto y medio plazo. Entre los que destacan el cambio de ciclo económico, el incremento de los costes, la pérdida del mercado del Este de Europa y las dudas sobre China, país responsable del 10% de las ventas del grupo.
A pesar de estos cuatro jinetes del apocalipsis, los analistas consideran que el castigo que ha sufrido la empresa en bolsa es excesivo y el consenso del mercado otorga a las acciones del grupo un recorrido alcista, aunque menos de lo previsto hace unos meses.
EL MERCADO OTORGA A LOS TÍTULOS DE INDITEX UN RECORRIDO ALCISTA, AUNQUE INFERIOR AL DE HACE UNOS MESES
En la actualidad los títulos de la compañía cotizan a 20,5 euros y la banca de inversión considera que el precio objetivo estaría por encima de los 26 euros. El problema de estas estimaciones es que suponen un arma de doble filo, porque si no se cumplen entonces todas las miradas se pondrán en el nuevo equipo directivo. Y la sombra de Isla es muy alargada.
El optimismo de los analistas se fundamenta en la gran inversión que ha hecho Inditex para transformar su modelo de negocio, potenciando las ventas online y reduciendo el número de tiendas manteniendo la superficie de ventas presenciales.
LA APUESTA TECNOLÓGICA Y EL CANAL ONLINE
El grupo ha cerrado pequeños establecimientos pero al mismo tiempo ha abierto tiendas de gran superficie (el ejemplo de Bilbao es claro en este sentido), al mismo tiempo que ha creado una plataforma tecnológica propia (Inditex Open Platform) para optimizar el stock y el tiempo de entrega de los artículos.
Si a todo ello le añadimos que el grupo no tiene deuda (con una posición financiera neta de 9.359 millones de euros) y que sus ventas crecieron el pasado año un 36% –superando los 27.700 millones, de los que una cuarta parte procedieron del canal online– podemos ver que sobre el papel el grupo tiene unas cuentas saneadas que justifican que el precio objetivo esté seis euros por encima del real.
EL GOLPE DE CREDIT SUISSE
Sin embargo, no todos los analistas son optimistas. Hace un mes Credit Suisse publicó un informe que calificaba el año 2022 como un ejercicio «muy desafiante» para la textil española, aunque señalaba que el castigo bursátil ya recogía buena parte de esta incertidumbre.
«Consideramos que el valor ya recoge un entorno de menor crecimiento y márgenes, pero no vemos ningún catalizador mientras la incertidumbre y la prima de riesgo se mantengan en niveles elevados» apuntaba el banco suizo en la primera semana de marzo estableciendo un precio objetivo de 21 euros por acción.
Para Credit Suisse, la pérdida del mercado ruso hará que vuele un 6% de la facturación de Inditex, mientras que Ucrania aportaba un 1% adicional. En ambos países el grupo ha cerrado sus establecimientos, lo que implica perder los ingresos de casi 600 tiendas pero seguirá teniendo que hacer frente a una parte de los costes fijos, sobre todo en materia de alquileres y nóminas.
la pérdida del mercado ruso hará que vuele un 6% la facturación de inditex, más un 1% adicional por la crisis de ucrania
Esta es una de las principales razones de que entidades como el Banco Sabadell hayan rebajado casi un 20% sus estimaciones iniciales de ebit para 2022, a pesar de lo cual recomienda comprar títulos de la entidad situando su precio objetivo en en entorno de los 28 euros.
Según informó Inditex en la presentación de resultados anuales, la venta en tienda y online entre el 1 de febrero (comienzo de su año fiscal) y el 13 de marzo creció un 33% respecto al mismo periodo de 2021, con un repunte del 21% frente a los máximos históricos contabilizados antes de la llegada de la pandemia. En este período, las ventas en Rusia y Ucrania representaron aproximadamente 5 puntos porcentuales del crecimiento de la facturación.
INDITEX SUBE PRECIOS «DE FORMA SELECTIVA»
El banco suizo anticipa, además, que las ventas de Inditex se estancarán en Europa occidental por la «débil confianza del consumidor y el incremento de los precios. De hecho el grupo textil ya ha anunciado que subirá los importes de sus productos «de forma selectiva», con un encarecimiento medio en España del 2% que se elevará al 5% en el resto del mundo en la campaña primavera-verano que ahora comienza.
las ventas de Inditex se estancarán en Europa occidental, según Credit Suisse
El nuevo consejero delegado se estrena poniendo a prueba el modelo de calidad-precio que siempre ha caracterizado a las marcas de Inditex y que ahora se enfrenta a su prueba de fuego en un contexto inflacionario.
RIESGOS EN CHINA
Y China es otro de los mercados donde Credit Suisse ve riesgos, aunque en este caso sean a medio plazo. «Ya éramos cautelosos acerca de las tasas de crecimiento futura dado que la empresa no aumenta su espacio comercial y la falta de diferenciación de las marcas ajenas a Zara«, indicaba el banco en su informe publicado 48 horas después de que se produjera el anuncio del cierre «temporal» de las tiendas en el Este de Europa por «no poder garantizar la continuidad de las operaciones ni las condiciones comerciales en la Federación Rusa».
EL ESCUDO DE ORTEGA
A pesar de todos estos problemas, Ortega pretende utilizar cómo escudo los más de 13.000 millones de euros destinados desde 2013 a preparar la plataforma comercial del grupo para un cambio de demanda que tomó velocidad con la llegada de la pandemia y que ha venido para quedarse.
El sector textil se ha convertido en actor de referencia en el comercio electrónico a pesar de las reticencias iniciales de los consumidores y la empresa gallega lleva años preparándose para ello. Fuentes del sector indican que «con una logística adecuada, un producto atractivo y una buena atención al cliente se pueden superar obstáculos como los actuales, llegando incluso a ganar cuota de mercado frente a otros competidores».
En el caso de Inditex la venta online alcanzó los 7.491 millones de euros al cierre del pasado ejercicio fiscal, lo que supone un aumento del 14% respecto a 2021. Aunque el año en el que realmente se disparó la facturación del grupo en las ventas por Internet fue en 2020 (el del confinamiento), con un repunte del 77%. En la actualidad la facturación por este canal representa el 25,5% del total de las ventas del grupo y las previsiones del nuevo equipo directivo es que asciendan al 30% del total en el ejercicio 2024.