Las ollas generalmente se nos queman, en algunas ocasiones por estar haciendo varias cosas a la vez, dejamos la hornilla a fuego alto y por algunas otras causas. El trabajo de limpiarlas para que queden como nuevas, es algo más fácil de los que mucho se imaginan.
Hay diferentes trucos que utilizaban nuestros abuelos y siguen siendo muy efectivos, comúnmente nos dejamos llevar por las diferentes marcas de productos que publicitan por la tele y no son tan eficientes como otros. A continuación algunos consejos para darle más brillo a tus ollas.
2El bicarbonato de sodio puede ser el arma secreta

El bicarbonato es un polvo especial para limpiar las ollas, su único defecto es que no se debe utilizar si las mismas son de aluminio. Hagamos en un tarro una mezcla con bicarbonato y agua, la cantidad depende del tamaño de la superficie a limpiar, funciona si esta quemada por dentro o por fuera.
Coloca el bicarbonato en el fondo de la olla bien esparcido, agrega dos cucharadas de agua y llévala al fuego, cuando comience a hervir, retira del fuego, espera que enfrié y con una esponja suave limpia el fondo de la olla, deberán desprenderse todos los restos de comida quemada que están cubriendo sus superficie.