Está de moda la cocina y la alimentación más natural posible, si bien con la crisis y la inflación muchos que quisieran aplicarla más no pueden, ya que conlleva un coste bastante superior a la cesta habitual. Sin embargo, quizá puedas empezar con el alimento más básico, el pan. Y es que aunque lo de masa madre es más caro, no es lo mismo y muchos lo defienden como «otro mundo». Veamos por qué para que tú elijas qué prefieres, indicándote las diferencias entre ambos tipos.
Recuerda que el pan se obtiene a través de la fermentación de una harina, conllevando a que sea un proceso que se basa en que la masa madre pueda tener consistencia. Actualmente está de moda el pan de masa madre, una situación que ha hecho que muchos lo usen pensando que es un producto más saludable que el normal o confeccionado por levaduras comerciales.
1QUÉ ES LA MASA MADRE
Para Pere Camps, que es dueño de la Pastisseria Lis en Barcelona y miembro del Gremi de Pastisseria de Barcelona, explica lo mágica que es la masa madre para sus preparaciones: “Cuando una pieza de panadería o bollería está elaborada con masa madre tiene una cualidad fundamental que la diferencia del resto: tiene personalidad, unas características propias, un sabor particular, un componente emocional que no encontraremos jamás en un producto, sea el que sea, de fabricación industrial”.
La masa madre es un cultivo que se realiza mezclando harina y agua y dejando que las levaduras salvajes como la Saccharomyces cerevisiae, y las bacterias y microorganismos presentes en el aire realicen una fermentación en el mismo tras consumir los azúcares presentes en la harina, después de transcurrir un tiempo. Esto sirve después para la fermentación de masas de pan, sustituyendo o en compañía de las levaduras frescas de panadero, aportando al pan más sabor, más cuerpo, cierta acidez y un carácter tradicional y artesano que hace que sea muy apreciado. Además, el pan de masa madre suele durar más tiempo fresco y crujiente.