La vitamina D, apodada la «vitamina del sol», debido a su capacidad para ser absorbida por el cuerpo a través de la luz solar, es un factor importante en el mantenimiento de la salud de las personas. Su cantidad de beneficios y usos, sobre todo para los músculos y huesos, la convierten en uno de los componentes indispensables para ayudar a prevenir enfermedades y aumentar la calidad de vida. Pero no sólo a tu salud, sino a tu aspecto físico.
En este sentido, el entorno es importante. Y es que la vitamina D es el único nutriente que el cuerpo produce cuando se expone a la luz solar. Sin embargo, hasta el 50% de la población mundial puede no tomar suficiente sol, y el 40% de las personas tienen deficiencia de vitamina. Esto se debe, en parte, a que la gente pasa más tiempo en el interior, usa protector solar al aire libre y lleva una dieta occidental baja en buenas fuentes de esta vitamina. Todo ello afectará a tu aspecto físico.
2¿CÓMO INFLUYE LA VITAMINA D EN TU FÍSICO?
Muchos lo desconocen, pero la vitamina D influye, y mucho, en tu cabello y piel, y por tanto se refleja intensamente en tu físico. Así que contar con los niveles adecuados de esta vitamina no sólo es vital para tu salud, sino para tu exterior. Con la toma diaria y regular te aseguras un crecimiento normal de las células de tu piel. Además, ayuda a recuperarse de golpes, cortes, quemaduras y lesiones.
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, y la barrera que separa el exterior de nuestro organismo. Su cuidado es por tanto imprescindible. Para la salud cutánea no sólo necesitas una dosis adecuada de vitamina D, sino de C, colágeno, ácido fólico y vitamina A.