Estar bajo presión es una situación bastante común para los emprendedores. Sin embargo, esto no es nada bueno, porque dispara los niveles de estrés y afecta a la motivación y la productividad. De ahí la importancia de saber recuperar la calma.
Lo que ocurre es que, cuando estamos sometidos a demasiada presión podemos llegar a tener una sensación de ahogo que nos impide ver con claridad qué es lo que está pasando y cómo podríamos salir de ello. Por suerte, hay algunos trucos que te pueden ayudar.
4Tómate un momento
Cuando notes que no puedes más, simplemente da un paso atrás y tómate un tiempo para respirar. Olvídate de las preocupaciones que rondan tu cabeza y simplemente céntrate en tu respiración.
A medida que el oxígeno inunda el cerebro notamos que nuestros pensamientos se vuelven mucho más racionales. Dejamos de darle vueltas y vueltas a las cosas y podemos ver la solución ante nosotros de una forma más clara.