La huelga de transportistas se enquista y divide ya a las patronales que conforman el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), el único interlocutor válido para el Gobierno de Pedro Sánchez para negociar una desbloqueo de la situación. No obstante, el Ejecutivo se niega por activa y por pasiva a entablar conversaciones con la convocante de este cierre patronal, Plataforma para la Defensa del Transporte de Mercancías.
El Gobierno promete ayudas sin concretar, dando la excusa a las asociaciones de transportistas divididas por sus asociados
Dentro del CNTC se agrupan las organizaciones y federaciones más representativas del transporte de mercancías. La más importante es la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), con un peso del 52% del total y está formada por más de 31.000 empresas del sector. No obstante, también se encuentran otras asociaciones, como Fenadismer, Fetransa y Feintra. Este trío ha roto la unidad del Comité Nacional del Transporte por Carretera tras nueve días de huelga.
El motivo de esta guerra interna entre los asociados se debe principalmente a las «migajas» y «a la falta de concreción» por parte del Gobierno sobre el anuncio de 500 millones de euros en ayudas para los camioneros. Y es que, el Ejecutivo, según las fuentes consultadas por MERCA2, no llevó a la mesa ni un sólo plan cerrado para atajar el paro de los transportistas ni tampoco concreciones de los anuncios.
LA FALTA DE CONCRECIÓN DEL MINISTERIO, LA EXCUSA DE FENADISMER PARA TAPAR SU RUPTURA INTERNA
Fenadismer se ha sumado a la huelga tras la propuesta del Ministerio de Transporte, dirigido por Raquel Sánchez. Este plan consistía únicamente en facilitar ese montante sin concretar nada más. «No había concreción alguna. Ni de qué forma ni de qué manera se iba a repartir esta cantidad, ni tampoco cuándo se iba a desbloquear el paquete», han asegurado fuentes de Fenadismer consultadas por este medio.
Por esta razón, se consideró que la propuesta era del todo «insuficiente» para hacer frente a un problema real que requiere de «soluciones inmediatas y urgentes«. Tras este encuentro institucional, la patronal que agrupa a numerosos autónomos y muy pocas pymes trasladó la propuesta a sus asociados y éstos votaron a favor de apoyar la huelga en una votación posterior.
«Están trabajando en pérdidas y entendemos perfectamente que hayan parado», han destacado desde esta patronal. No obstante, las mismas fuentes han rechazado secundar una huelga indefinida, tal y como plantea la Plataforma para la Defensa del Transporte de Mercancías. «El paro durará hasta que se reconduzca la situación», han comentado. De esta forma, si la ministra y el Gobierno adoptan soluciones de forma inmediata, concretadas y especificadas con fechas Fenadismer y el resto de asociaciones que se han sumado al cierre patronal volverían de nuevo a las carreteras para reiniciar la actividad.
EL GIRO INESPERADO DE FENADISMER: RETOMAR EL PROTAGONISMO
«Se exigía una respuesta razonable y razonada por parte del Ministerio y no ha sido así», han puntualizado las mismas voces. Desde el departamento que dirige Raquel Sánchez no hubo nada más que el mero anuncio. Desde Fenadismer, además, han señalado que la huelga podría ir a un empeoramiento en el sector de la distribución debido a que se han sumado cerca de 100.000 nuevos conductores a este paro.
«Pedimos medidas urgentes y de eficacia inmediata«, han señalado. En esta patronal están valorando aún qué tipo de acciones podrían realizarse para reivindicar la importancia de este sector y exigir estas soluciones al Gobierno.
Sin embargo, este cambio de parecer en esta importante asociación se ha cogido con una gran desconfianza en el seno de otras importantes agrupaciones de autónomos y empresas. «Es un discurso confuso», han apuntado fuentes del Comité consultadas por este medio. Y es que, en apenas diez días, Fenadismer ha pasado de un posicionamiento completamente contrario a las movilizaciones a hablar del «cierre patronal».
LAS ASAMBLEAS DE FENADISMER, PARTICIPADAS POR AUTÓNOMOS EN HUELGA
El problema de fondo de estas asociaciones reside en la falta de liderazgo y en la gestión de masas. «Su comunicado después de la asamblea es de una lectura compleja para quien no pertenece al sector», han apuntado estas voces. Y es que, según ha podido conocer este medio, en la asamblea participaron socios con fuertes intereses favorables al paro, que convencieron a la mayoría para secundar la huelga. Sin embargo, las voces oficiales autorizadas evitan pronunciar la palabra «indefinida» o cuanto menos la rechazan completamente. «En vez de aguantar el chaparrón y escuchar las críticas de los asociados uno a uno, escogieron el riesgo de la asamblea«, han indicado.
Asimismo, las mismas voces han asegurado que la cúpula de Fenadismer está completamente en contra de la huelga, aunque reconocen que han perdido el protagonismo de las movilizaciones y tratan de retomarlo con acciones, eso sí también sin concretar. No es un hecho habitual con esta plataforma, caracterizada por su decidida actuación en cuanto a las movilizaciones de los transportistas se refiere.
FENADISMER ESTUDIA AHORA SUS PROPIAS MOVILIZACIONES
De hecho, fuentes oficiales de Fenadismer se han mostrado en contra de los piquetes violentos y de los bloqueos en los grandes centros logísticos. De hecho, ha pedido que se permita trabajar a quienes continúan en la carretera, pero esta reclamación ha caído en saco roto por el momento.
Y es que, la Plataforma de Defensa continúa bloqueando los principales puntos de acceso de los camiones y centros neurálgicos. En Barcelona, los piquetes han parado prácticamente la actividad dentro del Puerto de Barcelona, pero sólo en algunas empresas, mientras MercaBarna opera con dificultades.
ANDALUCÍA Y LA CORNISA CANTÁBRICA, LAS MÁS AFECTADAS
Por otro lado, los taxistas han aprovechado la coyuntura para colapsar Barcelona desde el aeropuerto hasta el Parlamento autonómico. Cabe recordar que los graves problemas de los transportistas no vienen por la invasión de Rusia a Ucrania. De hecho, a las puertas de la Navidad, la CETM consiguió cerrar un acuerdo con el Gobierno en plena amenaza de un cierre patronal en esas fechas. La sangre no llegó al río entonces, pero el riesgo ahora se ha materializado.
Decenas de grandes empresas dependientes del transporte de mercancías por carretera han paralizado temporalmente. En concreto, los principales puntos afectados se encuentran en Andalucía, la cornisa Cantábrica y en menor medida Castilla-La Mancha. En Madrid y Cataluña las afectaciones son mínimas, aunque en estos días están coincidiendo movilizaciones de otros sectores, como el educativo.