Los rumores en el trabajo están a la orden del día. Algunos tienen una base de verdad y otros son totalmente inciertos, pero todos ellos desequilibran el ambiente y acaban afectando a los empleados.
Porque rompen la necesaria tranquilidad que es necesaria para que los trabajadores puedan concentrarse en sus tareas. Los rumores hacen que comiencen las habladurías y todo el mundo está más pendientes de ellos que de su trabajo. Por suerte, podemos acabar con ellos.
7Auditar la cultura organizacional para evitar los rumores
Es importante revisar la cultura que tiene la organización con respecto a la comunicación de información y su política en referencia a los rumores. Lo ideal es tener un sistema de comunicación interna que sea eficiente.
Combinado con una política de tolerancia cero frente a los rumores, que incluya sanciones para este tipo de comportamientos.