Las patatas fritas de McDonald’s son, desde hace tiempo, uno de los productos más exitosos de la cadena, superando a las que ofrece la competencia. Alargadas, doradas, con una textura tierna por dentro y crujientes por fuera, con una buena dosis de sal, son el acompañamiento perfecto en cualquier de los menús que escojamos. Incluso son un delicioso y adictivo tentempié por si solas. ¿Quién no querría replicarlas en su propia casa para comerlas a cualquier hora?
5TRUCO PARA LAS PATATAS NATURALES
Si no queremos usar patatas congeladas y preferimos intentar conseguir las patatas fritas de McDonald’s con patatas naturales podemos aplicar el siguiente truco. Se trata de cocer las patatas antes de freírlas. Cortamos las patatas en bastones finos y las hervimos durante 8 minutos en agua a la que habremos añadido 1 cucharada de azúcar, 2 cucharaditas de sal y 1/2 cucharada de vinagre. Una vez cocidas, se escurren y se ponen a freír hasta que estén doradas.