La morosidad de la Administración Pública lleva años en el punto de mira. Aunque se han hecho avances, lo cierto es que las instituciones públicas siguen acumulando retrasos en los pagos a proveedores.
Entre los principales perjudicados están los autónomos, puesto que muchos de ellos en algún momento han trabajado para la Administración, ya sea prestando un servicio o entregando productos.
3El intento más reciente de frenar la morosidad de la Administración Pública
En la actualidad se están intentando adoptar nuevas medidas para reducir la deuda de las Administraciones. De hecho, está previsto que se transfiera a unos 2.000 Ayuntamientos una buena cantidad de fondos públicos.
Dinero que debe ir destinado a abonar facturas de proveedores cuyo período de pago ya hubiera superado los 30 días en julio de 2021. La medida todavía no se ha puesto en marcha y los expertos ya vaticinan que no será suficiente.