La morosidad de la Administración Pública lleva años en el punto de mira. Aunque se han hecho avances, lo cierto es que las instituciones públicas siguen acumulando retrasos en los pagos a proveedores.
Entre los principales perjudicados están los autónomos, puesto que muchos de ellos en algún momento han trabajado para la Administración, ya sea prestando un servicio o entregando productos.
2El sistema parece no funcionar
Diferentes gobiernos se han encargado de poner en marcha medidas para poner al día a la Administración con respecto a las deudas pendientes, pero ninguna de ellas ha sido del todo efectiva.
Quizá se deba a que la deuda total es excesivamente grande. Además, nunca deja de crecer. Aunque se paguen algunas facturas, siguen entrando otras que se quedan igualmente pendientes de abono.