El mercado inmobiliario va a tener un año de crecimiento. Las previsiones del sector son buenas, y los retos a los que se tiene que enfrentar van a poder sortearlos con facilidad. En medio de este contexto, otro de los puntos positivos durante este año va a ser la inversión extranjera. De hecho, y según previsiones del sector, se estima que esta crezca, aumentando así los visados llamados ‘golden visa’. De hecho, el año pasado ya crecieron por encima de los niveles registrados en 2020, y se espera que este año continúen aumentando.
La ‘golden visa’ es el instrumento financiero que utilizan los inversores extranjeros para, además de comprar inmuebles en España, conseguir la nacionalidad de manera fácil. Fue implantado en nuestro país en 2013, como un intento de atraer capitales foráneos, y las nacionalidades predominantes han ido variando. Entre las que más destacan están los inversores chinos, estadounidenses y rusos. Pero también hay inversores latinoamericanos, que ven en nuestro país menos barreras por compartir el idioma.
Pero una de las claves de las ‘golden visa’ es el alto precio que hay que invertir en los inmuebles, que es a partir de 500.000 euros. Esto hace que la mayoría de inversiones sean de las llamadas de lujo o de alto standing. Es este sector el que está en el punto de mira de estos inversores. Según Elizabeth Hernández, directora de Barnes Barcelona, «esta iniciativa, cada vez más popular y conocida entre los inversores internacionales, fomentará la inversión en activos inmobiliarios de lujo en Barcelona en 2022. El pasado año, la emisión de este tipo de visados se ha mantenido estable pese a las restricciones de movilidad provocadas por la pandemia.
«El buen pronóstico que se otorga al sector de cara a 2022 y los precios competitivos que ofrecen los inmuebles ubicados en Barcelona y alrededores atisban un buen año para el luxury real estate barcelonés», apunta Hernández. A esto se añade que uno de nuestros grandes competidores en la ‘golden visa’, Portugal, ha cambiado la normativa para solicitar el visado de inversión. Así, nuestro vecino ha limitado los supuestos, y una inversión residencial en Lisboa, Oporto y zonas costeras de alta densidad quedarán exentas de la solicitud de ‘golden visa’.
El pasado año hubo un aumento de las peticiones de visados de ‘golden visa’
PRONÓSTICO PARA 2022
«El buen pronóstico que se otorga al sector de cara a 2022 y los precios competitivos que ofrecen los inmuebles ubicados en Barcelona y alrededores atisban un buen año para el luxury real estate barcelonés» señala la directiva de Barnes. En este sentido, reconoce que existe cierta incertidumbre sobre la finalidad con la que los inversores internacionales realizarán operaciones en nuestro país. «Si bien es cierto que, en los últimos años, la tendencia era obtener rentabilidad a través del alquiler de los inmuebles, actualmente la inversión extranjera se enfoca en obtener segundas residencias en lugares como Barcelona» advierte.
Además, ya el pasado año se vino observando un aumento de este tipo de inversión extranjera en España. Según el Ministerio de Exteriores, a mitad de año se habían expedido 324 ‘golden visa’, un número que se acercaba a las 394 emitidas en todo el año 2020. No es de extrañar que el año haya acabado por encima del de 2020, mientras que la previsión para este es que siga creciendo. A esto ayudaría el cambio normativo en Portugal, que haría que muchos de los inversores vieran una alternativa en nuestro país por su proximidad geográfica.
Así, 2022 se perfila como uno de los años claves para la inversión inmobiliaria, a pesar de ciertas incertidumbres, como la ley de Vivienda. Se espera que dicho anteproyecto de ley no esté aprobado hasta final de año. Por tanto, la inversión extranjera seguirá aumentando en los próximos meses. De hecho, se ha venido registrando un incremento desde que finalizaron las restricciones a los desplazamientos el pasado año, por lo que no es probable que afecte a este tipo de inversiones.