Las nuevas placas de vitrocerámica e inducción han sustituido poco a poco a las de gas, aunque tenga sus contras. Además, su superficie vidriada y lisa facilita mucho la limpieza de éstas, y no tienes que andar quitando parrillas, elementos de los fuegos, etc. Sin embargo, cuando gotean los alimentos y se secan, es complicado devolver el brillo y dejarla como nueva.
Existen multitud de productos para este tipo de superficies, pero también hay algunos secretos ocultos que deberías conocer para limpiarla de forma fácil, barata y rápida.
7Bicarbonato para las quemaduras de la vitrocerámica
El bicarbonato sódico es uno de los productos más baratos y con más aplicaciones. Estos polvos pueden servir para reducir la acidez estomacal, como levadura para las masas, e incluso como limpiador de multitud de materiales.
También sirve para las placas de vitrocerámica. Tan solo tienes que disolver dos cucharadas de bicarbonato de sodio en 10 cl de agua y con la mezcla aplicar a la superficie quemada, agregar un chorro de vinagre (también puedes usar limón), dejar 5 min que actúe y retirar con una bayeta.