A la espera de que se conozcan los resultados del cierre de 2021, Catalana Occidente afronta 2022 con un nuevo CEO, Hugo Serra, y un viejo dilema: cómo crecer. La aseguradora se mantiene en el top cinco del ranking español, pero si quiere jugar la Champions puede que tenga que adquirir negocios o entrar en una operación de concentración. La parte más complicada de esta ecuación es cómo hacer una operación de concentración y mantener el control accionarial. El accionista mayoritario de Catalana Occidente es Co Sociedad de Gestión y Participación (62%). La familia Serra es quien controla esta sociedad y, con ello, la aseguradora.
MUY LEJOS DE LAS QUE MANDAN
Catalana Occidente fue la cuarta aseguradora en España a finales de 2020, si bien, al cierre del mes de septiembre ocupaba el quinto puesto en el ranking de aseguradoras (grupos y entidades), según los datos de la asociación Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras (ICEA). A 31 de septiembre tenía 2.342 millones de euros en primas. Por encima de Catalana Occidente estaba Allianz (2.426 millones) y a una distancia sideral se encontraban el grupo Mutua (4.218 millones), Vidacaixa (5.276 millones) y Mapfre (5.320 millones). Por debajo, en el sexto puesto, Axa, que contaba con 2.000 millones de euros en primas.
Estas cifras dejan claro que, más allá de una labor comercial sobresaliente que haga que superen en primas a Allianz, el nuevo consejero delegado, Hugo Serra se enfrenta al reto del crecimiento inorgánico. Esto implica decidir si quiere buscar una pareja de baile con la que unirse o comprar algún negocio concreto. También puede seguir como hasta ahora, obviamente.
Tras desempeñar distintas responsabilidades en multinacionales del sector financiero, Hugo Serra se incorporó al Grupo Catalana Occidente como miembro del consejo de administración en 2006. En 2008 inició su recorrido por distintas áreas de grupo hasta que en 2009 comenzó a prestar apoyo a Presidencia. En 2013 fue nombrado director general adjunto a la Presidencia -cargo que ostenta su padre, José María Serra Farre, desde octubre de 2002-. Hugo Serra También ha sido vicepresidente del consejo de administración del grupo y consejero en distintas sociedades. Desde el 1 de enero de 2022 Hugo Serra es el consejero delegado de Grupo Catalana Occidente.
HUGO SERRA SE INCORPORÓ AL GRUPO CATALANA OCCIDENTE EN 2006
LISTADO DE ADQUISICIONES
La lista de adquisiciones llevadas a cabo por Catalana Occidente en España desde 1999 es extensa: MNA, Crédito y Caución, Nortehispana y Lepanto, Seguros Bilbao, Atradius, Groupama, Previsora Bilbaina y Antares. En cuanto a posibles nuevas compras, desde la compañía apuntan que «el objetivo de Grupo Catalana Occidente es seguir impulsando el desarrollo de nuestras redes de distribución, principalmente de la mediación (agentes de seguros y corredores), figura primordial en nuestro modelo de negocio». «También estaremos atentos a las oportunidades de adquisiciones o alianzas estratégicas que nos permitan mejorar la propuesta de valor a nuestros clientes, la obtención de sinergias operativas y comerciales, así como complementar nuestro posicionamiento en mercados o actividades concretas», apuntaron.
Hay un factor clave a tener en cuenta en esta historia: la mayoría de control en Catalana Occidente está en manos de la familia Serra. Esto es así porque el accionista mayoritario de la aseguradora es la sociedad Co Sociedad de Gestión y Participación (62)%, una sociedad controlada por la familia Serra. De hecho, el presidente de la misma es José María Serra Farre, que a su vez encabeza el grupo Catalana Occidente.
Está por ver el futuro del control accionarial en caso de una operación de concentración que tenga como implicada al grupo Catalana Occidente. Un banquero catalán solía repetir a MERCA2 que «si no es para mandar, las fusiones no interesaban» a su entidad. Esta cuestión puede inclinar la balanza de los Serra, si surge la ocasión. Sobre el papel, el hecho de que la familia Serra tenga mayoría de control accionarial -mediante una sociedad- hace que sea complicado lanzar una oferta pública de adquisición (opa) sobre Catalana Occidente. Esto, a priori, da tranquilidad al grupo para trabajar en la operación que mejor pueda cuadrarles. Otra cosa es qué pueda suceder si hay una fusión.
LA CLAVE RESIDE EN LA MAYORÍA DE CONTROL QUE OSTENTA LA FAMILIA SERRA
CRECIMIENTO ORGÁNICO
En este marco, Catalana Occidente seguirá desempeñando su labor para crecer de modo orgánico. Su negocio tiene dos patas fundamentales: los seguros tradicionales (que opera bajo las marcas Catalana Occidente, Plus Ultra, Nortehispana y Seguros Bilbao) y el seguro de crédito (que opera bajo las marcas Atradius y Crédito y Caución).
España es el país más importante para el negocio de Catalana Occidente (65,66%). Tanto en España como fuera del territorio español, uno de los retos que tiene es sacar más partido a los seguros tradicionales. De este modo, se expondría menos a un negocio con mucho más riesgo como es el de los seguros de crédito. Estos seguros protegen a las empresas de los riesgos de impago asociados a la venta de productos y servicios a crédito. Suponen el 40,3% del negocio total de la aseguradora, mientras que el negocio tradicional se queda en el 59,7%.
LOS BENEFICIOS
Hasta septiembre, el volumen de negocio de Catalana creció un 7% y los beneficios aumentaron un 66%, llegando a una ganancia atribuida de 361 millones de euros. Hubo una mejora del resultado recurrente del negocio tradicional y del negocio del seguro de crédito. Fueron 202,4 millones de euros en el negocio tradicional (un 4,3% más) y 175,5 millones de euros en el negocio de seguro de crédito (un 312,9% más), según explicaron en el informe financiero del tercer trimestre de 2021.
Buena parte de las ganancias vinieron por el seguro de crédito, que, sin embargo, está expuesto a la evolución de la covid-19, tal y como reconocieron en la aseguradora en el informe financiero del tercer trimestre de 2021. La clave será que la economía funcione, que los negocios no se paren. En España, Catalana Occidente domina de modo claro este mercado. Según los datos a los que ha accedido MERCA2, en febrero del año pasado su cuota de mercado era del 46,26%, mientras que Solunion contaba con un 25,34% y Cesce, el 19,13%.