Operación Triunfo es mucho más que un talent-show: es el trampolín de lanzamiento de muchos artistas a la industria de la música. Sin embargo, su paso por el programa, aunque entretenido para espectadores y fans, no siempre es igual de grato y productivo para los participantes. Mientras que algunos han logrado fama mundial, otros se han convertido en juguetes rotos.
2JULIA MEDINA QUEDÓ QUINTA EN 2018
Es el caso de la joven Julia Medina, que participó en la edición de 2018. Esta cantaora, nacida en San Fernando, Cádiz, en 1994 ha confesado que lo pasó muy mal en Operación Triunfo, a pesar de que le fue bastante bien y se convirtió en la quinta finalista de aquel año. El talent le dio suficiente visibilidad como para dar sus primeros pasos en la industria, aunque antes ya había formado parte de un grupo llamado Saurom como vocalista, llegando incluso a lanzar un disco llamado ‘La Magia de la Luna’.