Con la llegada de la Navidad tiramos la casa por la ventana, a pesar de las subidas de precios, y compramos no sólo de todo sino productos en la gama alta de coste. Es el caso del marisco, producto estrella en estas fechas para cualquiera que quiera agasajar a la familia e invitados. Pero eso no significa tirar el dinero, así que si lo compras ahora te ahorrarás bastante, congelándolo. La cuestión es luego cómo descongelarlo para que esté perfecto, y sobre todo, qué no hacer. Te lo contamos.
4¿Y CON EL RESTO?
En cuanto al marisco que se congeló tan cual, sin cocerlo previamente, como los más habituales en Navidad de gambas y langostinos, nunca los saques del congelador directamente a la cazuela y la cocción. De esta manera las piezas de fuera se cocerán más y quedarán demasiado blandas.
La cuestión es dejar que se descongele hasta que las piezas se puedan separar. Es entonces cuando podemos meterlo a cocer con un buen puñado de sal, y cuando haya alcanzado el punto de cocción, pasarlo a un bol con agua helada. Con ello conseguirás una carne tersa y jugosa.