Es habitual que las parejas quieran compartir cama al convivir bajo el mismo techo, pero en ocasiones es un hábito que puede afectar a la salud. Si no se tiene cada día un descanso reparador se debería buscar el problema. La falta de sueño puede darse por diferentes factores externos, pero si entre ellos está principalmente implicada tu pareja lo mejor podría ser dormir por separado.
7Toma la decisión que mejor se adapte a tu entorno
Si tras analizar los factores externos que te provocan la falta de sueño consideras que compartir cama con tu pareja no te afecta trata de resolver el problema con un especialista. Si por el contrario tu pareja te impide el descanso, deberéis hablar para buscar una solución en conjunto. Igual con dos camas separadas juntas que os den vuestro espacio es suficiente, ya que evitarás los movimientos de la otra persona o quedarte sin manta. Sin embargo si el problema de sueño es por ronquidos puede que sea necesario que durmáis en habitaciones separadas para lograr descansar. De todas formas, lo mejor es que probéis las distintas alternativas que puedan funcionar en vuestro caso y podáis amoldaros a los cambios de forma progresiva.
