Al montar un negocio una de las primeras decisiones que debes tomar es cuánto vas a cobrar a tus clientes por los productos o servicios ofrecidos. De tu estrategia de pricing puede depender en buena parte el éxito de tu idea.
Aunque pensamos que un precio barato siempre es más atractivo, no siempre ocurre así. Lo que buscamos realmente es que el producto o servicio tenga un valor que el cliente considere justo pagar a cambio de lo que le ofrecemos. Veamos cómo lograrlo.
8Destaca el valor añadido de tus productos o servicios
Los clientes están dispuestos a pagar más por un producto o servicio de lo que pagarían a otro profesional o empresa si saben que lo que tú les ofreces tiene un valor añadido. Por ejemplo, si reciben una excelente atención, o si el proceso de devolución es sencillo y rápido.
El valor añadido aumenta el valor percibido por el cliente (el beneficio que obtiene al comprarte a ti). En consecuencia, está dispuesto a pagar más por lo que tú le ofreces.