La manzanilla es una infusión muy habitual en los hogares y una de las más consumidas. Se utiliza desde hace muchos años y su uso más extendido es para tratar naturalmente la salud del estómago. Muchas personas recurren a esta infusión para evitar o aliviar digestiones pesadas, y a la vez mejorar el funcionamiento intestinal. Su nombre científico es Chamaemelum nobile y aunque por lo general solemos beberla cuando nos encontramos mal, la realidad es que recomendable tomarla de forma habitual, ya que tiene otras funciones interesantes además de cuidar el aparato digestivo.
5REDUCE EL RIESGO DE DIABETES
La manzanilla es una infusión que también puede contribuir a controlar algunas enfermedades de origen metabólico como por ejemplo la diabetes. Consumir una taza de forma diaria, puede ayudar a mantener unos niveles adecuados de azúcar en sangre. Si ya se padece diabetes, al controlar el índice glucémico, pueden mejorar mucho los síntomas de la enfermedad.