Si iniciar un negocio propio siempre es complicado, la cosa se vuelve todavía más difícil cuando se trata de emprender con discapacidad. No obstante, los Poderes Públicos están tomando medidas para que esto no sea así.
En los últimos años ha crecido el número de ayudas destinadas a aquellas personas que tienen reconocido algún grado de discapacidad y deciden dar el valiente paso de ponerse al frente de su negocio.
4Ayudas para emprender con discapacidad y conciliar
Puede ocurrir que el emprendedor no tenga una discapacidad, pero sí tenga que cuidar de un familiar discapacitado, y para estos casos también hay bonificaciones. En función de la discapacidad que tenga el familiar al que se esté cuidando, se reduce más o menos la cuota.
Por ejemplo, si la discapacidad física o sensorial es superior al 65%, la bonificación de la cuota por contingencias comunes es del 100%. Este tipo de ayudas están orientadas específicamente a los nuevos autónomos.