Si iniciar un negocio propio siempre es complicado, la cosa se vuelve todavía más difícil cuando se trata de emprender con discapacidad. No obstante, los Poderes Públicos están tomando medidas para que esto no sea así.
En los últimos años ha crecido el número de ayudas destinadas a aquellas personas que tienen reconocido algún grado de discapacidad y deciden dar el valiente paso de ponerse al frente de su negocio.
2Bonificaciones de Seguridad Social al emprender con discapacidad
El pago de la cuota de cotización a la Seguridad Social es uno de los gastos más grandes que tiene que afrontar un emprendedor, por eso hay ayudas como la tarifa plana destinadas a quienes acaban de empezar a trabajar por su cuenta.
En el caso de las personas con discapacidad, existe una bonificación especial. Una reducción de 62,50 euros mensuales de la cuota por contingencias comunes durante 12 meses si se escoge la cuota mínima de cotización.