En esta época de frío, lluvias y tiempos cambiantes, la gripe y el refriado vuelven a hacer su aparición. Incluso, para muchos es una temporada donde les resulta imposible escaparse de ninguno de los dos, tanto, que se padece con más frecuencia de lo que se desearía. Es por esto que, desde bien pequeños, nos han hecho uso de los remedios para ambos catarros. Pero, ¿qué hay de las vitaminas?
Estos procesos los producen los diversos tipos de virus, que pueden dar lugar a congestiones, estornudos, dolor de garganta, tos y a veces cefalea, fiebre y ojos enrojecidos, aunque es verdad que los síntomas varían de persona a persona y de resfriado a resfriado. De todos modos, también es posible combatir tanto la gripe como el propio resfriado de la mano de algunas vitaminas. Las conocemos desde MERCA2.
5Las del grupo B, aptas para las ‘defensas bajas’
Asimismo, en estas fechas la mayoría de niños y personas adultas están mucho más propensas a contagiarse del virus debido a la falta de nutrientes que podrían mantener en su cuerpo. Así que, para esta protección, también podemos echar mano de las que son las vitaminas del grupo B, otra de las importantes pero no tan conocidas como, por ejemplo, la D o la C.
Estas funciones muy relevantes en el organismo, lo que las convierte en garantes de la salud. Tampoco es necesario consumir grandes cantidades, pero sí mantener una dieta que proporcione los niveles adecuados. Estas intervienen en la respuesta inmune, en el metabolismo de los hidratos de carbono, proteínas o ácidos grasos, así como participan en procesos de detoxificación, crecimiento de tejidos y producción de glóbulos rojos. Son muy aptas para cuando estamos de ‘defensas bajas. Se dan en ocho tipos, y se encuentran en alimentos como las legumbres, el pescado, hojas verdes, carne, mariscos, leche, huevos, cereales o frutos secos.