En esta época de frío, lluvias y tiempos cambiantes, la gripe y el refriado vuelven a hacer su aparición. Incluso, para muchos es una temporada donde les resulta imposible escaparse de ninguno de los dos, tanto, que se padece con más frecuencia de lo que se desearía. Es por esto que, desde bien pequeños, nos han hecho uso de los remedios para ambos catarros. Pero, ¿qué hay de las vitaminas?
Estos procesos los producen los diversos tipos de virus, que pueden dar lugar a congestiones, estornudos, dolor de garganta, tos y a veces cefalea, fiebre y ojos enrojecidos, aunque es verdad que los síntomas varían de persona a persona y de resfriado a resfriado. De todos modos, también es posible combatir tanto la gripe como el propio resfriado de la mano de algunas vitaminas. Las conocemos desde MERCA2.
3Las vitaminas de tipo A refuerzan el sistema respiratorio
Se sabe que el estrés oxidativo puede afectar de forma negativa a la función del sistema inmune, que nos defiende de virus y bacterias. Por este motivo, y más allá de la importancia en vitaminas como la C, los deportistas también recurren a la de tipo A. Esta, al igual que la E y la K, se presenta como un remedio certero en diferentes alimentos para ayudar a combatir el resfriado o gripe, o al menos protegernos de buena manera ante ello.
Esta, que entra en el grupo de las vitaminas liposolubles, tienen propiedades que son bastante eficaces para actuar ante las mucosas respiratorias, o lo que es lo mismo: promueve la formación de mucina (uno de los ingredientes del moco y de las partículas respiratorias que expulsamos al respirar), lo que ayuda al sistema inmunitario a controlar su defensa contra los antígenos y a mantener la integridad general de las barreras mucosas. Estas vitaminas de TIPO A las podemos hallar en alimentos como la zanahoria, calabaza, melocotón o la mantequilla.