La cadena de comida rápida más famosa del mundo se prepara para un calvario judicial que pondrá en riesgo buena parte de su negocio en Europa. La tortuosa relación que mantiene McDonald’s con sus franquiciados desde hace años ha provocado duros enfrentamientos que en más de una ocasión han acabado en los tribunales, pero estos casos puntuales van a convertirse en una avalancha de demandas que afectarán al negocio de España, Francia e Italia, mercados claves para el grupo estadounidense en el Viejo Continente.
Según confirman fuentes jurídicas a MERCA2 varios bufetes de abogados han comenzado ya a trabajar y a mantener reuniones para definir la estrategia acusatoria contra McDonald’s en los citados países, por considerar que la dirección de la cadena de restauración está violando la normativa de competencia, al obligar a los franquiciados a firmar contratos en los que les obliga a contratar un único proveedor logístico, lo cual les genera sobrecostes.
La clave sobre la que están edificando los bufetes varias demandas millonarias en los principales mercados europeos del grupo es una sentencia de un juzgado español (el de instrucción número 3 de Castellón), en la que condena a McDonald’s a devolver cerca de cuatro millones de euros a un franquiciado por los gastos derivados del pago al proveedor impuesto por la cadena (Havi Logistics).
En la sentencia se considera probado que la relación contractual entre la cadena y el proveedor se ocultó deliberadamente porque era la vía para obtener unos ingresos complementarios a la actividad principal e ilegales. Según los cálculos de los peritos, refrendados por el juzgado, el sobrecoste que soporta cada franquiciado supera el 10%.
Según los cálculos de los peritos, refrendados por el juzgado, el sobrecoste que soporta cada franquiciado supera el 10%.
La clave del conflicto es que Havi Logistics es la única empresa con derecho a suministrar los productos que luego los restaurantes sirven a los clientes una vez cocinados, un privilegio que no se indica en los contratos que firma la cadena con los franquiciados.
La cuestión está ahora sobre la mesa de la Audiencia Provincial de Castellón, que debe determinar si confirma esta sentencia clave para los franquiciados españoles (que rondan el medio millar) pero también para los del resto de Europa, ya que los contratos son casi idénticos en todos los países.
30 MILLONES DE EUROS SÓLO EN ESPAÑA
En el caso de que prosperen las demandas colectivas que están ya preparando varios bufetes de abogados –entre ellos Cremades Calvo Sotelo– el impacto para las cuentas del grupo norteamericano será severo. Tan sólo en España el desembolso será de unos 30 millones de euros, ya que la facturación anual de las franquicias españolas de McDonald’s ronda los 300 millones de euros. La pelea será dura ya que el grupo con sede en Chicago dispone de un ejército de abogados para recurrir cada una de las demandas presentadas.
Otro elemento que respalda las pretensiones de los franquiciados es que la autoridad encargada de velar por la competencia en Italia (la AGCM, equivalente a la CNMC española) ha tomado cartas en el asunto y ha iniciado una investigación ante el clamor de los franquiciados. Y lo que dirime no es sólamente la cuestión de la obligatoriedad del proveedor sino otra serie de incumplimientos contractuales por parte de la cadena estadounidense que también podrían ser objeto de investigación en España si la CNMC sigue los pasos de su homóloga italiana.
CONTRATOS ABUSIVOS
Entre los elementos añadidos por la autoridad antimonopolio transalpina en su resolución está la obligatoriedad de que el potencial franquiciado asuma un periodo de formación con McDonald’s con una duración de entre seis meses y dos años.
Se trata de una cláusula que es muy gravosa para el aspirante ya que desconoce si al final del proceso se le adjudicará un restaurante y el lugar donde estará ubicado. Según confirman las fuentes jurídicas consultadas “durante este periodo de formación no se informa de las condiciones económicas del contrato que firmará una vez superada la prueba”.
“Los problemas de McDonald’s con sus franquiciados vienen de largo y ya en el año 2017 hubo una acción conjunta en Francia, Italia y Alemania por prácticas anticompetitivas que acabó siendo archivada. Sin embargo ahora los abogados de los afectados consideran que tienen posibilidades de lograr que sus reclamaciones salgan adelante, especialmente tras la sentencia española y la investigación de la AGCM italiana”, añaden las mismas fuentes.
NUEVAS FRANQUICIAS CANIBALIZAN AL RESTO
Al mismo tiempo que ha ido empeorando la relación de la cadena con los encargados de llevar las riendas de los restaurantes la empresa ha hecho crecer tanto las nuevas franquicias en los últimos diez años que ha erosionado gravemente la rentabilidad. Y es precisamente esa la razón que explica por qué hasta ahora los afectados no habían analizado los problemas en sus contratos.
Es tan sencillo como que, a más restaurantes, menos margen. Y en los últimos diez años, McDonald’s ha aumentado un 25% su número de restaurantes en España. Cada nuevo establecimiento canibaliza a los que están más próximos, lo cual afecta a la facturación de todos ellos. En este contexto la empresa acaba de crear una página web en la que expone historias de éxito con el objetivo de captar nuevos franquiciados.
Y mientras todo esto sucede en Europa, los directivos del grupo en Estados Unidos sacan pecho tras presentar unos resultados correspondientes al tercer trimestre del año espectaculares superando los previos a la pandemia. Con unas ganancias de 5.900 millones de dólares hasta septiembre, lo que supone un incremento del 76% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
El mayor crecimiento interanual de ventas se dio en los mercados internacionales, liderados por Reino Unido, Canadá, Francia y Alemania. Y es precisamente en estos países donde McDonald’s se juega su futuro, en los tribunales.