El paracetamol es uno de los medicamentos más populares que hay en España y en cualquier parte del mundo. Muchos de los consumidores acuden a sus farmacias de confianza para comparar cajas en diferentes tamaños para paliar las dolencias por las que se ven mermados.
Lo que muchas personas desconocen es que el paracetamol solo mitiga los dolores si estos de tipo inflamatorio. Además, también existen periodos concretos o rangos de edad en los que no es aconsejable su ingesta. Sí, si pensabas que el paracetamol servía igual para un roto que para un descosido, estabas muy equivocado. Por eso, a continuación, te contamos cuáles son los casos en los que nunca deberías tomar paracetamol. Sigue leyendo si quieres saber cuáles son.
2El paracetamol no es un medicamento adecuado durante el embarazo y la lactancia
Cuando estás embarazada no es una buena idea recurrir a una pastilla de paracetamol para calmar tus dolores. Porque en realidad sus efectos podrían ser contraproducentes y podría, por tanto, agravar la situación. Aparte de dañar al feto. Es más, de hecho se recomienda consultar con el médico habitual qué tipos de pastillas puedes tomar y los que no. Y si no saber si estás embarazada o no, es recomendable que te hagas un test antes de tomar la pastilla.
Tampoco el periodo de lactancia es una buena época para tomar este medicamento. Piensa que, de hacerlo, el paracetamol puede pasar de tu organismo al de tu bebé a través de la leche materna. Por eso de nuevo, consulta con tu médico cuáles son tus opciones antes de recurrir a la ingesta de un paracetamol cuando estés en periodo de lactancia y creas necesitarlo.