Una buena y adecuada refrigeración de los alimentos es la base para mantener las frutas y verduras en el mejor estado durante el mayor tiempo posible. Sin embargo, existen muchas dudas en torno al cuidado que se debe tener para conservar estos alimentos frescos con sus nutrientes y evitar que se deterioren rápidamente.
La primera recomendación y secreto de las fruterías es saber qué productos se deben poner más cerca o lejos de los ventiladores de refrigeración, ya que hay frutas que sí toleran las bajas temperaturas, mientras que hay otras que el frío hace que se dañen tempranamente.
Accore Supply, una de las empresas líderes en la venta de cámaras frigoríficas de refrigeración, resalta la versatilidad que ofrece en cuanto a los diferentes tamaños y dimensiones que conforman los espacios refrigerados para ubicar cada fruta en el lugar que corresponda, ya que solo así se evita la aparición de bacterias con la humedad y temperatura inadecuada. Estos cuartos refrigerados son espacios de gran tamaño en los que se pueden almacenar alimentos con el objetivo de mantener su buena conservación a lo largo del tiempo.
¿Cómo extender la vida de los alimentos?
Por ejemplo, nunca se deben exponer a bajas temperaturas alimentos como la cebolla o la patata porque se echarían a perder. Otro de los alimentos a tener en cuenta son los cítricos, los cuales no se deben conservar a temperaturas por debajo de los 2ºC porque esto contribuye a la disminución de su calidad, ya que las bajas temperaturas afectan a sus nutrientes.
Por eso, es muy importante que los supermercados, tiendas de alimentación, floristerías y pescaderías cuenten con una buena cámara frigorífica, ya que es muy importante que se conserve la seguridad y calidad de cada uno de los productos que ofrecen.
Algunas de las frutas que deben estar alejadas del refrigerador son el kiwi, las peras o manzanas. Por el contrario, alimentos que sí deben ser estrictamente cuidadas son la lechuga, brócoli, espinacas y rábanos, con temperaturas que oscilen los 10 grados centígrados, previo a un profundo proceso de limpieza.
La temperatura adecuada
En primer lugar, los expertos consideran que es muy importante lavar muy bien las frutas antes de que se almacenen en la cámara frigorífica, así como retirar las partes golpeadas o zonas muy maduras que pudieran acelerar una disminución en la calidad del alimento.
Los cajones del refrigerador también cumplen una labor fundamental: mantienen la humedad necesaria para que se garantice la conservación de los alimentos. Por esta razón, se debe realizar una limpieza constante para evitar que la acumulación de organismos estropee las frutas y verduras.
Sin duda alguna, el objetivo es evitar la formación de microorganismos que afecten el bienestar de los alimentos con un buen trabajo de limpieza y de conservación gracias a una buena máquina de refrigeración.