Aunque puede parecer un término nuevo, el edadismo ha estado presente en nuestra sociedad desde hace muchas décadas, muy especialmente en el mercado laboral. Es el responsable de que las oportunidades laborales disminuyan drásticamente a partir de los 40 años.
De hecho, este fenómeno es también una de las causas que están provocando que el número de autónomos que se dan de alta en el RETA pasada la barrera de los 45 años lleve ya varios años aumentando.
5Un avance imparable
La estadística no miente, el número de nuevos autónomos que tienen más de 44 años supera al de los autónomos que están por debajo de los 34. Esto no es nada malo, pero sí resulta bastante llamativo.
Se suele pensar que emprender es cosa de jóvenes, pero cada vez son más las personas de mediana edad y los séniors que deciden dar el paso de montar su propio negocio.