Una de las salsas más deliciosas y queridas en todo el mundo es la salsa de tomate. En los supermercados es uno de los productos más vendidos, pero lo cierto es que por muy casera que diga que es, nada como la que realmente se hace en casa. Sin embargo, por comodidad, muchos son los que optan por los productos industriales.
Es cierto que elaborar una buena salsa de tomate implica hacerla a fuego muy lento y durante mucho tiempo para que quede perfecta. Pero existe una solución para acelerar el proceso y hacer tu propia salsa y que la puedas disfrutar siempre sin esfuerzos.
5Seleccionar unos buenos tomates
Otra de las claves de la salsa de tomate, además de hacerla a fuego lento, es el tipo de tomate. Se debe seleccionar un buen tomate de temporada y que esté maduro.
Puedes optar por la variedad que desees, como los de pera o cualquier otro. Pero siempre que esté muy maduro. De lo contrario, el sabor de la salsa dejará mucho que desear.