El número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales se disparó un 253,2% en el segundo trimestre del año en relación al mismo periodo de 2020, hasta situarse en 3.243, su cifra más alta en cuatro años, según la estadística de ejecuciones hipotecarias publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En valores trimestrales, es decir, en comparación con el primer trimestre, las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales se incrementaron un 1,1% entre abril y junio.
El objetivo principal de esta estadística es ofrecer trimestralmente el número de certificaciones de ejecuciones hipotecarias iniciadas e inscritas en los Registros de la Propiedad durante el trimestre de referencia. Estadística recuerda que no todas las ejecuciones de hipoteca terminan con el lanzamiento (desahucio) de sus propietarios.
Estadística recuerda que España se encontraba en el segundo trimestre de 2020 en pleno confinamiento e iniciando la desescalada, por lo que muchas ejecuciones no se pudieron iniciar en los Registros de la Propiedad.
En el segundo trimestre del año se iniciaron 9.753 ejecuciones hipotecarias, un 18,1% más que en el trimestre anterior y un 79,3% por encima del dato del segundo trimestre de 2020. De ellas, 9.239 afectaron a fincas urbanas (donde se incluyen las viviendas) y 514 a fincas rústicas.
Las ejecuciones hipotecarias sobre fincas urbanas subieron un 16,9% en relación al trimestre anterior y un 73,8% respecto al segundo trimestre de 2020.
Dentro de las fincas urbanas, 5.887 ejecuciones correspondieron a viviendas, un 13,7% más en tasa intertrimestral y más del doble en términos interanuales, y de ellas 4.090 eran ejecuciones sobre viviendas de personas físicas, un 5,2% más que en el trimestre anterior y cifra un 242,8% superior a la del segundo trimestre de 2020.