Entre todas las especialidades gastronómicas de nuestro país una de las más apreciadas es la paella. Pero también es uno de los platos que más debate e indignación generan, por los múltiples errores que se cometen al prepararla. Muchos restaurantes utilizan el término ‘paella’ para vender un preparado que poco o nada tiene que ver con el plato original, más allá de ser una mezcla de arroz con algunos ingredientes variados. Si no quieres que te engañen cuando vayas a comer fuera, ni ofender a un valenciano con una pseudopaella, por llamarle de alguna forma, mejor toma nota de los errores que jamás debes cometer si quieres preparar la verdadera, auténtica y original paella.
6EL RECIPIENTE ADECUADO
Otro error imperdonable es preparar una paella en un recipiente inapropiado. La paella se llama así por algo. Según la RAE, una de las acepciones de este término es ‘sartén donde se hace la paella’, por lo tanto es un utensilio imprescindible. Si la haces en una sartén grande, una cacerola o una olla, puede que esté riquísima, pero jamás será una paella. A modo de curiosidad, no es correcto llamarle ‘paellera’. La paellera es el hornillo de gas donde se coloca la paella para su preparación, o bien la persona encargada de elaborar el plato. El diámetro de la paella, y la cantidad de arroz deben ser proporcionales. Lo suyo es que el arroz ya cocido, quede con solo medio centímetro de grosor (así conseguiremos el deseado socarrat). Es decir no se tiene que poder introducir un cucharón y que rebose.