En septiembre se terminan las vacaciones escolares y llega el nuevo curso con la vuelta al cole. El comienzo de las clases supone gran cantidad de cambios para los niños que pueden afectarles. Es recomendable que se realicen de manera progresiva para que se adapten con mayor facilidad. Toma nota de los consejos que te ayudarán a conseguirlo.
2Adaptar los horarios de los niños de manera gradual
Durante las vacaciones escolares, en los meses de verano, los niños se acostumbran a los días largos yéndose a dormir y levantándose más tarde. Carecen de obligaciones o se ven muy reducidas con actividades que mandan los profesores para que no pierdan el hábito ni los conceptos aprendidos. Dedican la mayor parte del tiempo a divertirse. Los viajes a la playa y los juegos ocupan el verano.
El inicio de las clases puede complicarse ya que conlleva nuevas obligaciones y es incompatible con disfrutar de tanto tiempo libre. Establecer nuevas rutinas previamente al comienzo del curso les permitirá adaptarse nuevamente al ritmo de forma gradual. Es recomendable comenzar a implantar cambios en los horarios al menos una semana antes de la vuelta al cole. Utiliza plantillas divertidas para anotar las actividades en el horario.