Cinco profesionales del hospital madrileño participaron en la carrera de ciclismo “Madrid-Lisboa Non Stop”
- Los doctores Piñero, Ibáñez, Aldamiz-Echevarría, Navarro y Muñoz recorrieron, sin parar y por relevos, unos 500 kilómetros hasta la frontera con Portugal entre las 12:00h del sábado 2 de julio y las 23:00h de la jornada siguiente
- La iniciativa ha sido «un reto más que gratificante» para estos profesionales médicos y deportistas amateur que les ha permitido consolidar su relación de colegas en una unión más allá del compañerismo y ha cumplido con sus expectativas en dos vertientes: la física y la de la convivencia y la aventura
A lo largo de dos duras jornadas, los pasados días 2 y 3 de julio, cinco profesionales de la Fundación Jiménez Díaz promovieron con su ejemplo el deporte y el trabajo en equipo como hábitos de vida saludables para el cuerpo y la mente al participar, junto a cerca de otras 400 personas, en la carrera de ciclismo «Madrid-Lisboa Non Stop.
Concretamente, los protagonistas de este desafío fueron los doctores Antonio Piñero Lozano, Borja Ibáñez Cabeza -ambos médicos adjuntos del Servicio de Cardiología Intervencionista; Gonzalo Aldamiz-Echevarría del Castillo, Felipe Navarro del Amo -jefe de Servicio y jefe asociado, respectivamente, de Cirugía Cardiovascular-; y Luis Enrique Muñoz Alameda, jefe del Servicio de Anestesiología y Reanimación y coordinador del Bloque Quirúrgico; todos ellos del hospital madrileño.
La convocatoria los llevó a recorrer, sin parar y por relevos, unos 500 kilómetros hasta la frontera con Portugal, frente a los cerca de 700 previstos hasta Lisboa (que no pudieron cubrirse porque, debido a las medidas de seguridad vigentes por la Covid-19 en el momento de la llegada, el gobierno luso no permitió la entrada en su territorio a ningún participante en la iniciativa).
Así, y junto a otros tres miembros del equipo, los ocho integrantes formaron dos equipos de relevos, para poder ir siempre junto a un compañero conocido. En total, medio millar de kilómetros repartidos en ocho etapas que recorrieron los cuatro ciclistas de cada grupo, alternándose para pedalear o descansar en la autocaravana en la que viajaban los integrantes que en cada etapa podían bajarse de la bicicleta, entre las 12:00h del sábado 2 de julio y las 23:00h de la jornada siguiente, hora a la que llegaron a la meta.
Una iniciativa que, a juicio de estos profesionales médicos y deportistas amateur, ha supuesto «un reto más que gratificante que les ha permitido consolidar su relación de colegas en una unión más allá del compañerismo y ha cumplido con sus expectativas en dos vertientes: la física y la de la convivencia y la aventura».
Tanto es así que, apenas un mes después de culminar esta gesta, aseguran estar predispuestos a repetir en próximos certámenes. Y a intentar sumar a más compañeros de la Fundación Jiménez Díaz en este saludable y estimulante desafío.