La ensaladilla rusa es uno de esos platos de la gastronomía nacional que se suelen relacionar con buenos momentos, como la paella cuando se hace con tus seres queridos. Cada persona tendrá sus propios recuerdos a los que les evoca este plato, desde aquellos momentos divertidos con una buena tapa de esta receta en el bar, hasta esos días festivos con tu familia comiendo una buena fuente de ella…
Para volver a revivir todo eso y hacer una ensaladilla perfecta puedes seguir una serie de consejos, como las cantidades exactas para cada persona, o las precauciones que deberías tener para evitar intoxicaciones que puedan transformar esos momentos felices en negativos.
3Mayonesa en su justa medida
La mayonesa es uno de los ingredientes críticos de la ensaladilla rusa. No puede faltar, ya que es la que aporta ese sabor y textura tan característica junto con la patata. Sin embargo, se debería agregar en la justa medida. Si se agrega en exceso camuflará el sabor del resto de ingredientes, y la ensaladilla quedará muy líquida. Si se peca de poca cantidad, el resultado es el contrario, un plato muy seco y pastoso, con mayor predominio del sabor a patata.
La cantidad ideal debe ser aquella que impregne bien al resto de ingredientes. Para no pasarte, lo mejor es ir agregando poco a poco la mayonesa e ir removiendo para ver el resultado. Así podrás conseguir el punto justo sin pasarse.