El mercado eléctrico anda revuelto; y las consecuencias se verán en los próximos trimestres. Aunque Iberdrola, primera gran energética en pasar por la lupa del mercado, alumbra lo que será una guerra sin cuartel. La compañía ha cedido más de 40.000 clientes en los primeros seis meses del año con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Y todo ello con la polémica sobre los altos precios de la luz de fondo.
El pasado 1 de junio se produjo el cambio tarifario de la luz. Esa fue la primera pica con la polémica sobre su recibo. Pero con el paso de los días, y la locura de los precios mayoristas, se ha descubierto un problema sistémico dentro del entramado eléctrico español. En ese contexto, todas las compañías se han rearmado para no perder clientes desde hace meses, y ahora se notan las primeras consecuencias.
En el caso de la energética dirigida por Ignacio Sánchez Galán, a cierre del primer semestre de 2020, y según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), contaba con 10.005.067 de clientes de luz. En estos momentos, y con las cifras remitidas a la CNMV, la cifra se sitúa en 9.963.000. Un deterioro en plena guerra comercial donde la competencia lleva meses con fuertes campañas comerciales.
Lo bueno para Iberdrola es que consigue menguar esta pérdida en clientes eléctricos con un alza en más de 50.000 abonados en el negocio del gas natural. Un nicho en el que lleva cuatro años seguidos de crecimiento. Además, la compañía también acumula crecimiento en el segmento de ‘smart solutions’, que se encarga de los servicios de autoconsumo, soluciones de calefacción y refrigeración; así como las mejoras de eficiencia.
IBERDROLA ANTE LA POLÉMICA
Todo esto se produce con unos precios de la luz en el mercado mayorista que están alcanzando máximos históricos y que, de una u otra manera, terminarán repercutiendo en el mercado residencial y empresarial. Ante esta situación, el presidente de Iberdrola ha querido explicar en la conferencia de presentación de resultados cómo afecta esta situación a su compañía.
Sánchez Galán ha asegurado que las eléctricas “no se benefician” de los precios altos en el mercado eléctrico y ha añadido que su negocio se ve afectado de “manera negativa” al tener que absorber los costes. “Debemos producir, pero a veces no tenemos suficiente y los precios altos no mejoran nuestros resultados, afectan negativamente a nuestra hoja de resultados”, ha manifestado Galán en una conferencia con analistas para presentar los resultados del primer semestre, estimando que el impacto de la subida en el precio de la luz es de “unos 12 céntimos diarios por cliente”.
Así, Galán ha puesto sobre la mesa el hecho de que las eléctricas integradas verticalmente deben acudir al mercado mayorista para comprar energía, ya que su propia producción no les llega para cubrir toda la demanda de sus clientes, vendida en gran parte a unos precios inferiores a los del mercado.
El directivo ha indicado que el nivel de precios en el mercado mayorista eléctrico se trata de una “situación temporal” y que se debe a los “elevados precios” de las materias primas, principalmente el gas natural por una falta de ‘stocks’.
El presidente de Iberdrola ha estimado que la actual presión en los precios de la luz sólo impacta al 10 por ciento de la energía en España, ya que el 90 por ciento restante tiene precios fijos y no se ven afectados por el mercado.
Asimismo, ha abogado por ofrecer una cesta de precios de la energía o establecer un precio fijo para la energía nuclear para esos consumidores afectados -los que están en la tarifa regulada (PVPC)-, medidas que podría dar resultados “sin ninguna perturbación en la regulación”.