Hay que ver lo ricas que están las croquetas. Son además, con permiso de la tortilla de patatas y de la paella el plato más representativo de nuestra gastronomía más clásica. Y eso ya es decir porque mira que nuestro recetario tradicional es muy amplio. El caso es que puedes degustar este rico plato en casi cualquier bar o restaurante de nuestro país. O si quieres puedes prepararlo tú en tu propio hogar sin temor alguno gracias a varios de los trucos que vamos a compartir contigo a continuación entre los que destaca el de cómo hacer con la harina para que te salga una salsa bechamel sin trucos.
2El ingrediente estrella para que la bechamel de tus croquetas quede de escándalo
La receta original de la salsa bechamel es aceite, harina, leche y sal. Pero tal y como te hemos contado antes, para que las croquetas te queden más cremosas has de sustituir el aceite de oliva por la mantequilla. Y además, todavía puedes hacer otra cosa para que la bechamel te quede más sabrosa. Y eso es, en concreto, sustituir la mitad de la cantidad de leche por caldo. Puede ser del tipo que sea. Es decir, del que más te guste y que pegue con el ingrediente que vayas a rellenarlas. Algunas opciones: caldo de verduras, caldo de pollo, caldo de marisco…