Los virus se van transformando con el tiempo como parte de su evolución natural y esto es lo que ha ocurrido también con el coronavirus SARS-CoV-2, que tantos quebraderos de cabeza está provocando a la humanidad desde inicios de 2020, cuando se convirtió en pandemia. Desde que se identificó este virus, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha ido supervisando, evaluando y clasificando las distintas variantes en categorías en dos tipos: VOI, o variantes de interés y VOC, o variantes preocupantes. En la actualidad, en la categoría de preocupantes se han clasificado cuatro cepas: Alfa, Beta, Gamma y Delta, pero es sin duda esta última, la variante Delta, la que más alarmas están activando en las autoridades sanitarias de todo el mundo.
3SITUACIÓN EN ESPAÑA
En España esta nueva cepa, identificada por primera vez en La India, supera el 20% en los cazos en cinco comunidades. En la Comunidad de Madrid, representa el 44,3% de los contagios, frente a los 41,6% de los positivos con la variante Alfa. Navarra y la Comunidad Valenciana también tiene prevalencia de variante Delta. La preocupación ante una quinta ola es evidente y la mayoría de las comunidades han optado por implantar nuevos toques de queda. Sin embargo, la propagación crece exponencialmente favorecida por el relajamiento de las vacaciones, los desplazamientos durante el verano, y la asombrosa capacidad de infección de esta mutación.