Es un hecho; después de darnos un buen chapuzón en la piscina o luego de haber entrado al mar y habernos refrescado en la playa, es bastante común que lleguen a producirnos molestias de oído debido a la entrada del agua como líquido, lo que hará de tapón y que tengamos ciertas molestias durante un tiempo, por lo que deberemos cuidarnos para proteger nuestra salud y sistema auditivo.
No obstante, cabe la posibilidad de que si el líquido se mantiene durante algún periodo más largo o continuado, pueda producir más allá de molestias, como dolores o, incluso, infecciones que deberán ser tratadas. Es por esto que desde nuestro portal de Merca2.es te presentamos una serie de recomendaciones y consejos para quitarnos esa agua de los oídos sin sufrir efectos secundarios.
2En la piscina, inclinar la cabeza para el lado del oído taponado y aguantar el máximo de aire posible
La primera gran técnica que nos puede resultar muy provechosa es la de inclinar la cabeza para el lado del oído que está tapado, muy diferente de sacudir la cabeza, algo que esto último no se debería hacer bajo ninguna circunstancia.
Así y una vez hayamos logrado inclinarla, tendremos que aguantar el máximo de aire posible con la boca, al mismo tiempo que producimos la técnica, algo que puede resultar muy bien para nuestros días de piscina y playa.
Esté será un buen método para evitar que si se nos taponen las oídos pueda ir a más, por lo que una vez salidos del agua de la piscina o la playa, será muy conveniente no tocarnos bruscamente ni los oídos ni realizar excesos ni golpes, ya que podría provocar en otros daños auditivos.