Seat y Volkswagen han apostado por España para acceder al primer PERTE del Gobierno. La automovilística ha mostrado su intención de participar en este proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica, aunque aún quedan por conocer varias incógnitas.
Bruselas ha dado luz verde al primer PERTE, que llega con semanas de retraso respecto al plazo previsto. El Gobierno ya ha anunciado que tendrá una dotación de 4.300 millones de euros, de los 9.000 en total que se compone esta primera ayuda.
SIN UNA UBICACIÓN CONCRETA
Seat y Volkswagen han pedido su inclusión en este PERTE que pondrá al vehículo eléctrico en el epicentro de la transformación económica. Iberdrola, CaixaBank y Telefónica, junto a 15 otras empresas, les acompañarán en este proyecto. Aunque no serán las únicas que pugnan por estos fondos. Los fabricantes de componentes de vehículos también han dado sus credenciales para acceder a estos fondos.
Seat ha presentado su proyecto para instalar una gigafactoría de baterías en España, junto a la fabricación de un nuevo vehículo eléctrico. No obstante, la automovilística no puede confirmar dónde se instalará debido a que será el Gobierno quien lo decida. «Aún no está confirmada la instalación de la tercera planta de baterías en España», han apuntado fuentes de la firma a MERCA2.
Esta incógnita es clave por la lucha entre varias comunidades para hacerse con este preciado botín industrial. Pese a la falta de concreción, la «intención» del grupo germano es «construir esta fábrica en España».
SEAT FÍA SU MOVILIDAD ELÉCTRICA AL PERTE
Esta intención de Seat es crucial de cara a su estrategia de producción. El grupo pretende desarrollar y fabricar su nuevo vehículo eléctrico urbano en 2025, cuyo precio ronda los 20.000 euros. No será hasta otoño cuando la automovilística desvele qué modelos se fabricarán en cada una de las plantas. El plan de Seat tiene una visión de largo plazo, para 2030. Para ello, espera iniciar iniciar la producción de baterías en 2023, para que en dos años más se ponga en marcha la producción del nuevo coche en Martorell.
Aún así, habrá que esperar a la decisión última del Estado para validar los proyectos. Y es que, las empresas deben cumplir con una serie de requisitos, como presentar un proyecto de fabricación y ensamblaje de equipos; la instalación de una fábrica de baterías eléctricas o pilas de hidrógeno; y otra fábrica de componentes.
Seat, con su nuevo modelo, lo haría todo en España y, según el plan presentado, tendría luz verde al cubrir las necesidades exigidas. De esta forma, accederían a la ayuda, mientras que el Estado desempeñará el papel de atraer inversiones.
UNA FÁBRICA COMPARABLE A LA DE TESLA
Seat y esta veintena de compañías no estarán solas en la presentación de proyectos. Antolín, Ficosa y Gestamp también han mostrado su disposición para acudir a este PERTE con otro proyecto, aunque de menor entidad y envergadura. Fabricarían baterías a menor escala, junto a otras empresas como Mindcaps y Delta Vigo. Todas ellas deberán cumplimentar la burocracia requerida formalmente para poder ser incluidas en el PERTE.
El objetivo del Gobierno con este PERTE es convertir a España en un ‘hub‘ de movilidad eléctrica. En caso de obtener el visto bueno al proyecto, el Grupo Volkswagen se ha comprometido a construir la fábrica de baterías en España.
De esta forma, España albergaría una se las seis grandes fábricas de baterías instaladas en Europa. Esta gigafactoría es comparable al complejo de Tesla en Berlín. Además, la ya planificada familia Small BEV -vehículo eléctrico urbano- «podría» producirse en España. La empresa Seat ha indicado que este modelo será clave en la movilidad eléctrica en Europa.
SEAT DARÁ A CONOCER LA ASIGNACIÓN DE SUS MODELOS EN OTOÑO
Habrá que esperar hasta el próximo otoño para conocer los detalles del plan estratégico de Seat para este nuevo vehículo. Hasta entonces no habrá anuncio oficial alguno. En noviembre, el grupo detallará en qué plantas se producirán los modelos, mientras espera que la planta de baterías se instale cerca de Martorell.
ESPAÑA PODRÍA CONVERTIRSE EN UN PILAR ESTRATÉGICO
Por el momento, se ha descartado por completo la fábrica de baterías en las instalaciones que dejará Nissan vacías a partir de diciembre. Otras comunidades autónomas pugnan por este proyecto, pero por ahora se desconoce su ubicación.
CREACIÓN DE EMPLEO, ESPECIALMENTE JOVEN
Y es que, la instalación de una planta de baterías en España crearía puestos de trabajo directos y ahorraría costes de producción. En caso contrario, habría que establecer un calendario en función de las necesidades y espacio de almacenaje, entre otras variables.
La precaución impera en este momento en la cúpula de Volkswagen y Seat. El uso del condicional en las declaraciones deja entrever diversos flecos o inconcreciones de cara a hacer realidad este proyecto.
Herbert Diess, CEO del grupo automovilístico, se ha referido a la construcción de la planta sujeto al designio del Estado. «España podría convertirse en un pilar estratégico» para el grupo, ha señalado el ejecutivo.
Eso sí, han mostrado su interés y predisposición para establecer «toda la cadena de valor» en el país. Este es un requisito indispensable para poder acceder al PERTE. De hecho, junto a esta obligación también se deben cumplir otra serie de factores. Entre ellos, la producción de vehículos eléctricos, sus componentes y la nueva fábrica de baterías. «Dependiendo del contexto general y del apoyo por parte del sector público, a partir de 2025 la familia Small BEV podría fabricarse en España», ha afirmado.
Además de la ubicación hay otra variable crucial que aún no se ha desvelado. El proyecto de Seat necesita la mano de una empresa tecnológica para la puesta en marcha de la fábrica. Por ahora, hay negociaciones con empresas, algunas de ellas avanzadas, pero la compañía ha evitado dar nombres.
UN PLAN ESTRATÉGICO BASADO EN UN FUTURO INCIERTO
El responsable de Tecnología del Comité Ejecutivo del Grupo Volkswagen, CEO de Volkswagen Group Components y presidente del Consejo de Administración de SEAT SA, Thomas Schmall, ha afirmado que están impulsando aún más su estrategia de baterías. «Tenemos la intención de construir la gigafábrica número tres en España», ha sostenido, sin poder asegurar que así se hará.
Sin aclarar dónde se ubicará la fábrica de baterías, el alto directivo ha considerado que «esta localización permitiría un suministro altamente seguro para la producción de vehículos eléctricos». «Al igual que en nuestras dos primeras fábricas previstas en Salzgitter y Skellefteå, planteamos construir la potencial gigafábrica junto con un socio estratégico», ha apuntado. «En su fase final, a finales de la década, la planta podría tener una capacidad anual de 40 GWh», ha considerado Schmall.
El plan de Seat para la próxima década pasa por el coche eléctrico urbano, un proyecto muy ambicioso en el que en menos de cuatro años comenzaría a producirse en Martorell. Para Seat, el vehículo eléctrico es un «hito importante» para consolidar la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático. Pero en el comunicado vuelve a referirse al condicional. «Podría convertirse en el motor de la transformación de la industria española del automóvil», ha concluido.