El mapa de las telecomunicaciones va a cambiar en España; y no solo por el 5G. La infraestructura fija dará un vuelco los próximos años, y Onivia será responsable en gran medida. El operador neutro de fibra -es decir, alquila su red a los demás- ha lanzado su “ya estamos aquí” de forma pública. Detrás de la empresa: tres fondos con gran pulmón financiero y un elenco de directivos curtidos en mil batallas en grandes compañías del sector.
Las dos cabezas visibles de la compañía, que esta semana está de plena actualidad por los rumores que le sitúan tras el cable (HFC) de Vodafone, son el CEO, José Antonio Vázquez; y la presidenta no ejecutiva, Marieta del Rivero. Vázquez atesora casi 10 años en Orange y un posterior paso por Euskaltel; mientras que Del Rivero ha pasado por Nokia, Ericsson o Telefónica, entre otras empresas.
El núcleo fuerte de dirección lo componen la directora comercial Pilar Hernandez, que ha pasado por Vodafone, Amena y un largo periodo en Nokia; la directora de Mercados y Producto, Icíar Martínez, que estuvo seis años en Orange España, y anteriormente en la matriz, France Telecom; el director Financiero, Francisco Belmonte, que pasó 19 años en Vodafone; la directora de Red y Sistemas, Laura Parra, que estuvo media docena de años en Yoigo; y el newtwork manager, Rafael Merino, que ha pasado 17 años en Vodafone y un lustro en Huawei.
Así es el plantel que pone cara a los fondos que gobiernan Onivia: Macquarie Capital (50%), Aberdeen Standard Investments (37%) y la japonesa Daiwa Energy & Infaestructure (13%). Fuentes del sector consultadas por MERCA2 aseguran que estos fondos tienen la cartera cargada como para invertir fuerte a corto plazo y que, a su vez, quieren desarrollar la compañía como un referente del sector.
En este sentido, Marieta del Rivero explicaba hace unas semanas en el diario Expansión que el objetivo es estar por encima de los 9 millones de unidades inmobiliarias pasadas por fibra para 2025. Es ambicioso, pero encaja con la dinámica que ha adquirido el sector. Si en el segmento móvil los operadores de telefonía están escindiendo sus negocios y creando torreras para sacar a Bolsa o coinvertir junto a socios industriales, en la fibra el camino tiende a ser similar. Y ese es el punto que quiere ganar Onivia.
ONIVIA SE MUEVE RÁPIDO
La semana pasada, en el encuentro sectorial ‘DigitalES Summit 2021’, Onivia tenía su momento de ascensión al estar presente en la mesa redonda de infraestructuras con otras grandes del mercado. Se trata de un momento importante, ese cambio donde la prensa pone mayor foco y los analistas asientan sus informes. José Antonio Vázquez era claro: “Vamos a ampliar nuestra huella”.
¿Pero hay margen? Tras hacerse con más de 2 millones de accesos de fibra de MásMóvil, precisamente con la compañía que dirige Meinrad Spenger tiene margen de tranzar nuevas alianzas. Tras comprar Euskaltel, los amarillos deberán sopesar que hacer con sus redes, y aquí es donde Onivia entra en escena, y donde sus fondos no tendrán miedo de invertir. El último millón de hogares supuso un desembolso cercano a los 400 M€. Esa cifra habría que multiplicarla por tres o cuatro para alcanzar los objetivos.
Lo positivo es que se trata de comprar redes ya desplegadas. Solo es cuestión de sentarse a negociar, valorar intereses y poner un precio. Esto llevaría a Onivia a ser uno de los grandes referentes en el negocio de la fibra neutra, que tiene a Lyntia como gran competidor, y a la propia Telefónica. Aunque son negocios distintos.
El operador azul alquila su red en modo mayorista y, en muchos casos, lo hace a sus propios competidores en las misas zonas donde comercializa sus ofertas. Sin embrago, Onivia es un operador neutro puro: alquila su red a terceros para que, a su vez, estos revendan de manera residencial. Y en cuanto a los negocios de MásMóvil, no le obliga a nada, solo a realquilarles la red y ser ellos quienes se encargan del mantenimiento y posterior inversión para desarrollarla, o no.
Ante este escenario, desde Onivia tienen claro sus objetivos: crecer en conectividad en redes de última milla llegando a más hogares y empresas, asegurar una red redundada, eficiente y con estándares de servicio de primer nivel; y contribuir al cierre de la brecha digital con redes rurales. En este aspecto, la compañía pone como ejemplo las recientes adquisiciones que permitirán al operador dar acceso a una red de fibra óptica a más de 1.000 municipios de menos de 10.000 habitantes en toda España.