La comunicación es una poderosa herramienta que tiene la capacidad de hacer que un pequeño negocio crezca. Por el contrario, si no la utilizamos bien, puede ser la “culpable” de poner los clavos en el ataúd de nuestro proyecto. Es muy importante a nivel interno y también a nivel externo, y hoy nos vamos a centrar en la que se desarrolla entre la empresa y los clientes.
Las habilidades comunicativas están entre las más demandadas por las empresas cuando buscan personas que ocupen puestos directivos. También son habilidades básicas que deben tener quienes se lanzan a la aventura de emprender. Como siempre hay margen para la mejora, aquí van algunos consejos para conseguir una interacción marca-cliente todavía más efectiva.
2Ajustar los tiempos de respuesta
No solo importa qué o cómo lo decimos sino cuándo lo hacemos. La comunicación entre un negocio y sus clientes debe ser fluida. Si una persona ha contactado con la empresa lo lógico es responderle en el menor tiempo posible.
En caso de que la comunicación tenga que ser remitida a otro departamento o haya que realizar algunas averiguaciones antes de dar una contestación, es aconsejable comunicar al emisor que se ha recibido su mensaje y que ya se está trabajando para darle una respuesta lo antes posible.