Para que un negocio sea rentable debe haber un buen ajuste entre lo que este ofrece y lo que demanda el mercado. Por eso, una de las tareas más importantes del emprendedor es crear una cartera de clientes e ir haciéndola crecer de forma progresiva, no solo añadiendo nuevos clientes sino también fidelizando a los que ya se tienen.
Captar los primeros clientes para un negocio puede parecer una tarea complicada, pero resulta más sencilla de llevar a cabo si desde el primer momento tienes claro qué es lo que tienes que hacer. Con tiempo, paciencia, y buenas prácticas, puedes conseguir un volumen de clientela que garantice la rentabilidad de tu proyecto.
5Cómo gestionar la cartera de clientes
Con mecanismos como los anteriores pueden entrar en contacto directo con personas que podrían estar interesadas en adquirir el producto o servicio que ofreces, pero quizá no hagan la compra en ese momento. Lo que tienes que intentar es obtener datos sobre ellos para establecer una relación comercial más personalizada.
Tienes que crear tu propia base de datos con esa información y administrarla bien. Por ejemplo, si quieres ofrecer un tratamiento de belleza en tu centro de estética y sabes que lo suelen contratar mujeres de 30 a 50 años, podrías lanzar una promoción específica dirigida a este público.