La tarifa plana para autónomos se puso en marcha en 2013. En un principio estaba pensada para ser algo temporal, pero ocho años después sigue de plena actualidad. A pesar de ello, siempre ha habido voces (incluso entre los propios autónomos) que señalan que no es verdaderamente útil.
Con la próxima llegada de la cotización basada en ingresos reales, la supervivencia de esta ayuda destinada a nuevos emprendedores está en entredicho y no falta quien afirma que es hora de que desaparezca. Esto nos lleva a la necesidad de analizar si de verdad este sistema seguirá siendo útil en el futuro y si de verdad ha cumplido con su objetivo.
4El coste para la Seguridad Social
La tarifa plana para autónomos le cuesta a la Seguridad Social unos 700 millones de euros cada año. Dinero que no está consiguiendo el objetivo de ganar emprendedores que sean capaces de sacar su negocio adelante.
Se estima que solo un 15% de los autónomos que se benefician cada año de la tarifa plana llegan a consolidar su negocio y pueden mantenerlo en el tiempo. Por eso, los expertos creen que hay que buscar otro sistema de ayuda que sea más eficiente. Porque de nada sirve atraer a más personas para que se den de alta en el RETA si pasados unos meses se ven obligadas a tener que darse de baja.