La salsa de tomate frito es una de las salsas más populares en todo el mundo. Se puede usar casi para cualquier plato, desde la típica pasta o la pizza, hasta el pescado o la carne. Su versatilidad y sabor la han transformado en una salsa imprescindible. Por eso Chicote te trae su receta y su truco para que puedas disfrutar de ella durante todo el año.
Una forma de aprovechar en la temporada, cuando los tomates están perfectos, y hacer una gran cantidad de salsa de tomate para poderla envasar y tener para todo el año. Así tendrás siempre salsa casera con el mismo esfuerzo, evitando tener que usar la comprada, que ni tiene el mismo sabor ni es tan saludable.
3¿Salsa saludable?
Si se trata de una salsa de tomate casera, como la que propone Chicote, se trata de una salsa bastante saludable cuyo principal ingrediente es el tomate, la cebolla, el ajo y la zanahoria. En el caso de la grasa, en este caso se trata de una vegetal, como es el aceite de oliva que se emplea para freír.
Esta salsa te aportará:
- Ajo: es un antiinflamatorio natural, además de tener propiedades antibióticas. Refuerza tu inmunidad y ayuda a reducir el colesterol malo. También tiene potentes propiedades antioxidantes.
- Cebolla: ideal para mejorar la circulación, la salud digestiva, además de tener propiedades anticancerígenas, antidiabéticas, antioxidantes y diuréticas.
- Tomate: protege la vista por su vitamina A, además de mejorar la circulación sanguínea, cuidar la piel, aportar antioxidantes y reducir el estreñimiento.
- Zanahoria: ayuda a reducir la acidez de la salsa, y evita agregar azúcar. Esto tiene un doble beneficio. Por una lado evitas el azúcar y por otro agregas un ingrediente que tiene propiedades anticancerígenas, para proteger la visión, y envejecimiento.
- Apio: es otro elemento muy diurético y depurativo. Es cardiosaludable y digestivo.