La edición de este año de ‘Supervivientes’ prometía mucho tras el casting confirmado pero no está cumpliendo las expectativas por unas cosas o por otras. Al no haber este año una gran estrella mediática como Isabel Pantoja o Rocío Flores en otras ediciones, se optó por el morbo de juntar a Alexia Rivas con Marta López o a Tom Brusse con su ex Melyssa, a la que dejó en ‘La isla de las tentaciones’ para irse con Sandra Pica. Las expulsiones, la audiencia y los pocos conflictos entre los concursantes no están ayudando.
Y es que tanto Marta recientemente, como Alexia ya han sido expulsadas, y tampoco coincidieron más de una semana al hacerse la separación entre los encallados en el barco y los de la isla. Al final se unieron en Playa Cabeza de León pero ya ha sido tarde, y encima, comparado con otras ediciones, reina la calma y las discusiones son tan absurdas y livianas, que parecen que las exageran para dar algo de juego.
4La surrealista situación de Melyssa
Como decíamos, toda esta situación entre Sandra y Tom le pilló en medio a Melyssa, no por casualidad o decisión propia, sino a expensas de la organización de ‘Supervivientes’. Y vaya si provocaron una situación surrealista. Lejos de recibir en ‘Supervivientes’ la visita de su madre o su pareja por su cumpleaños, la portuguesa se topaba con Sandra Pica. Pero no solo le privaron de ello sino que sería la ex del francés quién debería comunicarle la noticia. Con una tarta en las manos y cara de desconcierto, Melyssa celebraba su cumpleaños consolando a su ex por el fin de su relación con la extentadora. La misma por la que Tom y Melyssa rompieron su relación en ‘La isla de las tentaciones’ hace un año.
Pero la portuguesa, lejos de quejarse o rebelarse, hizo gala una vez más de su noble corazón. Se mostró dulce y empática con el que un día le destrozo el corazón por completo. Una paz que todos sabíamos iba a durar poco y más aun con la llegada de Sandra a la isla, que una vez más ha causado estragos en la relación – esta vez de amistad – de Melyssa y Tom. Por lo menos la influencer pudo endulzar su día con una deliciosa tarta pero no con la visita de su nuevo novio.
Sin embargo, la calma pronto se transformó en indignación, sumada a la de la mayoría de concursantes, que no daban crédito a una situación que, a tenor de las actitudes de Tom y Sandra cuando no había cámaras, calificaban todo de montaje. Melyssa explotó y verbalizó lo absurdo e injusto de todo ello, cuando podría haber celebrado su cumpleaños con la visita de su pareja.